Camille está feliz de que los chicos tengan un póster en la popular revista Pop Tiger, pero al parecer los chicos no lo disfrutan mucho. Los cuatro están cubiertos de heridas, pues les pasó
lo siguiente: Los chicos jugaban tranquilamente (realmente jugaban hockey a lo salvaje) en su apartamento, y Kelly les dice que tienen una sesión de fotos para la revista Pop Tiger. El fotógrafo
es un bobo que quiere que los chicos se tomen fotos con peluches. Cuando van a tomar la foto perfecta, llega la policía y se llevan a Kelly y a Gustavo por no cumplir con su servicio
comunitario.